Si eres latinoamericano y estás viviendo o quieres vivir en España, seguramente te has topado con el término Arraigo social. En esta guía práctica te explico de forma clara qué es, para quién es, cuáles son los requisitos, cómo se tramita y qué errores evitar. Mi intención es que, después de leerla, puedas ver claramente si esta vía es para ti y qué pasos tienes que dar.
¿Qué es exactamente el arraigo social?
El arraigo social es una vía de regularización para personas extranjeras que están en España y que, aunque no tienen residencia legal, han creado vínculos con la sociedad española. Gracias a esos vínculos (familiares o sociales) y al cumplimiento de ciertos requisitos, pueden solicitar una autorización de residencia temporal y trabajo.
En términos sencillos: estás en España, has vivido aquí un tiempo, tienes ciertas conexiones, quieres regularizarte —este es uno de los caminos.
Con la reciente reforma de la normativa (Real Decreto 1155/2024, de 19 de noviembre) se han cambiado varios requisitos, lo que abre nuevas oportunidades en 2025.
¿Para quién está pensado este permiso?
Este permiso está pensado para personas extranjeras no comunitarias (es decir: que no son de la Unión Europea, del Espacio Económico Europeo o Suiza).
Además, es para aquellas que pueden acreditar:
- residencia continuada en España,
- vínculos sociales o familiares en España,
- medios de vida (contrato de trabajo o recursos económicos) en muchos casos.
Por ejemplo: un latino que lleva dos años viviendo en España sin papeles, empadronado, trabajando de forma informal, tiene amistades, participa en actividades sociales y quiere regularizarse a través de esta vía.
Requisitos básicos (y lo que cambia en 2025)
Permanencia continuada en España
Debes haber vivido en España de forma continuada. Con la reforma se ha reducido el tiempo requerido a 2 años como regla general para el arraigo social.
También se exige que las ausencias no hayan sido excesivas (el reglamento las limita). Por ejemplo, en algunos casos no más de 120 días en los últimos 2 años.
Ausencia de antecedentes penales
Tanto en España como en tu país de origen y en los países donde hayas residido los últimos cinco años.
Vínculos familiares o informe de integración social
Tienes dos caminos:
- Vínculo familiar: cónyuge, pareja de hecho registrada, ascendientes o descendientes que residan legalmente en España.
- Informe de integración social (arraigo social) emitido por el ayuntamiento o la comunidad autónoma que certifique que estás integrado en la sociedad española (participación en actividades, apoyo de entidades, empadronamiento, etc.)
Contrato de trabajo o medios económicos
Generalmente se exige:
- un contrato de trabajo (cuenta ajena) que asegure al menos el salario mínimo interprofesional (o proporcional) y según jornada. Por un trabajo digno
- O alternativamente, si no tienes contrato, que puedas acreditar ingresos suficientes o un proyecto por tu propia cuenta. España Abogados
Pasaporte y demás requisitos formales
- Pasaporte en vigor (hay excepciones en el caso de ciudadanos de Venezuela, que puedan presentar con pasaporte caducado). España Abogados
- Empadronamiento (certificado de residencia municipal) durante los años necesarios.
- Pago de la tasa correspondiente.
¿Cómo se tramita la solicitud paso a paso?
Este es un resumen práctico, con ejemplos, para que lo puedas seguir sin perderte.
Paso 1: Reúne tu documentación
Ejemplo: María, colombiana, lleva 2 años viviendo en Madrid. Ya está empadronada desde entonces, no tiene antecedentes penales. Tiene un contrato de trabajo de 20 horas semanales en una tienda. Empieza a juntar:
- Formulario EX-10 debidamente cumplimentado.
- Tasa modelo 790, código 052 (o el que toque) pagada.
- Certificado de antecedentes penales de Colombia y de España.
- Certificado de empadronamiento que acredite los 2 años.
- Contrato de trabajo, nóminas o justificante.
- Copia completa del pasaporte.
- Si aplica, documentación que pruebe los vínculos familiares o el informe de integración social.
Paso 2: Presenta la solicitud
- Puedes hacerlo presencialmente en la Oficina de Extranjería de la provincia donde resides.
- También, en muchos casos, telemáticamente, mediante certificado digital, por la sede electrónica correspondiente.
- Recibirás un resguardo de presentación, que es importante conservar.
Paso 3: Espera la resolución
- La administración dispone de un plazo de 3 meses para responder. Si no recibes nada, puede entenderse como desestimada por silencio administrativo.
- Si es favorable, obtendrás una autorización de residencia temporal y trabajo, que normalmente tiene duración de 1 año.
Paso 4: Solicita la tarjeta de extranjero (TIE)
Una vez concedido el permiso, debes solicitar tu tarjeta física de extranjero mediante el modelo EX-17, acudir a la cita, presentar fotografías, tasa, huellas.
Paso 5: Renovación o cambio de tipo de residencia
- Dentro de los 60 días previos al vencimiento o hasta 90 posteriores puedes pedir la renovación.
- También puedes cambiar a una residencia de larga duración si cumples los requisitos.
Preguntas frecuentes que suelen surgir
¿Cuánto tiempo dura el arraigo social?
Inicialmente suele ser 1 año y se puede renovar, siempre que sigas cumpliendo los requisitos.
¿Cuál es la diferencia entre arraigo social y residencia legal normal?
El arraigo social es una autorización por circunstancias excepcionales para personas que no tenían residencia legal, pero que han creado vínculos. No es lo mismo que la residencia inicial común (por trabajador, reagrupación familiar, etc.).
¿Cuántos tipos de arraigo hay?
Sí, hay varias modalidades: arraigo social, arraigo sociolaboral, arraigo familiar, arraigo socioformativo…
¿Cuál es el requisito más difícil de cumplir?
Depende de cada caso. Para muchos, acreditar los vínculos o demostrar un contrato de trabajo conforme puede ser lo más complicado. Por eso es clave preparar bien el expediente.
¿Puedo hacerlo sin trabajo?
Sí, si puedes acreditar medios económicos suficientes o que tienes un proyecto viable por cuenta propia, dependiendo del caso. Pero es más sencillo con un contrato de trabajo formal.
Errores frecuentes y cómo evitarlos
- Presentar empadronamiento con interrupciones que impidan acreditar los dos años. Asegúrate de que el empadronamiento es continuo.
- No pagar la tasa correcta o usar el código equivocado. Verifica el número y el formulario (790 modelo).
- Contrato de trabajo insuficiente (menos de jornada, empresa no al corriente de pagos). Revisa que el empleador esté al día y que la jornada mínima sea correcta.
- No traducir o apostillar los documentos de país de origen cuando se requiere.
- Presentar la solicitud en la provincia incorrecta (debe ser donde resides).
- Intentar contar tiempo como solicitante de asilo para el cómputo del arraigo sin cumplir los requisitos específicos. El País
Consejos personalizados para latinoamericanos que viven o quieren vivir en España
- Empadrónate lo antes posible en el municipio donde vives. Es la prueba más visible de tu residencia.
- Conserva recibos, contratos de alquiler, facturas de servicios (luz, agua), que pueden servir como prueba de estancia.
- Busca un contrato de trabajo formal cuanto antes, aunque sea de jornada parcial, para sumar puntos.
- Participa en actividades locales, voluntariados o entidades sociales: refuerza tu “integración” que luego aparece en el informe de ayuntamiento.
- Consulta de forma periódica la web de Extranjería o del Ministerio correspondiente para conocer los cambios normativos.
- Ten siempre a mano un listado organizado con documentos escaneados y copias; facilita mucho la presentación.
- Si estás en una situación irregular, no ignores el proceso: cuanto antes empieces a reunir requisitos, mejor.
- Consulta con un asesor o abogado de extranjería si tienes dudas legales o de procedimiento; un error puede costar tiempo.
¿Y después del arraigo social? ¿Qué posibilidades hay?
Una vez que obtengas el arraigo social y cumplas con tu autorización de residencia y trabajo, el paso siguiente podría ser:
- Renovar la autorización y continuar estableciendo tu vida en España.
- Cambiar a una residencia más estable (residencia de larga duración) si cumples los requisitos (por ejemplo, haber residido legalmente tres años con este permiso, etc.).
- En el futuro, incluso acceder a la nacionalidad española si se cumplen las exigencias (tiempo, integración, idioma, entre otros).
El arraigo social es un primer gran escalón hacia la estabilidad.
Conclusión
Si estás viviendo en España y quieres regularizar tu situación, el arraigo social es una herramienta potente. No es fácil, pero es claro y posible, siempre que cumplas con los requisitos y prepares bien el expediente. Con esta guía espero que veas el camino más claro, sin jerga complicada, y que te sientas más seguro al dar esos pasos. Recuerda: empadronamiento, contrato o recursos, buenos vínculos y documentación bien organizada son tus aliados.
Mucho ánimo: dar ese paso te abre puertas para vivir con más tranquilidad, trabajar legalmente y construir tu futuro en España.
